Un nuevo estudio sugiere que el consumo de cannabis en adolescentes no causa esquizofrenia

Investigadores del Instituto de Desarrollo Infantil de la Universidad de Minnesota llevaron a cabo un estudio longitudinal de gemelos en el que intentaron establecer una relación causal entre el consumo de cannabis en la adolescencia y el riesgo de esquizofrenia en la vida adulta.

Para ello, analizaron dos cohortes de gemelos cuyo consumo de cannabis en la adolescencia, así como la incidencia del trastorno por consumo de cannabis, fue documentado y posteriormente comparado con la propensión a la psicosis. Los resultados parecen refutar la creencia, largamente sostenida, de que el consumo de cannabis, sobre todo si se inicia en las primeras etapas de la vida, es uno de los factores de riesgo para desarrollar psicosis.

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Asociación vs. Causalidad

En consonancia con las investigaciones anteriores, el estudio encontró una clara relación entre el consumo de cannabis y el trastorno por cannabis, por un lado, y la propensión a la psicosis, por otro. Sin embargo, las cosas se pusieron más interesantes en la parte del estudio en la que se compararon gemelos idénticos entre sí.

Los científicos descubrieron que cuando uno de los gemelos tenía más exposición acumulada al cannabis que el otro, la incidencia de esquizofrenia no era estadísticamente diferente. La razón por la que el consumo de cannabis y las enfermedades mentales han demostrado una asociación tan consistente a través de numerosos estudios puede ser algún otro factor de confusión.

Lo que sí importa son los antecedentes familiares de enfermedad mental

Estudios anteriores han establecido que la predisposición a los trastornos psicóticos es hereditaria. Se planteó la hipótesis de que esta vulnerabilidad congénita era la causa principal tanto de los problemas mentales como del abuso del cannabis. Al fin y al cabo, es habitual que las personas cuya salud mental se deteriora enmascaren sus síntomas con sustancias que alteran la mente.

Y con esta hipótesis en mente, los autores incluyeron datos genéticos moleculares de los sujetos en el diseño del estudio. De nuevo, la asociación entre la esquizofrenia y la predisposición innata estaba ahí.

Al comentar los resultados de su estudio, los autores sugirieron que los responsables políticos preocupados por el deterioro de la salud mental de la sociedad en general dejen de culpar al cannabis y se centren en las causas reales de los trastornos psicóticos.